Siempre me llamó la atención y hasta me gustó este título de un libro crítico sobre historia argentina: "Una nación para el desierto argentino" de Tulio Halperin Donghi.
Siempre me dió idea de utopía, de decadencia, de rancios aires patriotas. Siempre me pareció justo lo de "desierto argentino".
Ya sé, soy extremista, y qué. De hecho formo parte del desierto, al menos cultural. Ayudé con cuatro libros y varios artículos a sembrarlo de más arena.
Polvo somos y al polvo volvemos.
1 comentario:
No menosprecies tu granito de arena.
Lo que a mí siempre me llamó la atención es el sonido del nombre, y sobre todo, el del doble apellido de Tulio Halperín Donghi.
Suena como si se llamara "Al Perindongui".
A lo mejor no suena tan cómico si lo leíste antes de oírlo. Yo se lo oí pronunciar a otro historiador antes de verlo escrito. Me sigue sonando gracioso.
(Me estoy casi durmiendo, por eso escribo tantas pavadas).
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